LaLiga ha presentado un recurso judicial contra el CSD por permitir la inscripción de los jugadores Dani Olmo y Pau Víctor con el FC Barcelona. El organismo que preside Javier Tebas considera que se ha vulnerado el control económico y la igualdad entre clubes.
LaLiga ha llevado a la justicia ordinaria su desacuerdo con el Consejo Superior de Deportes (CSD) tras la controvertida autorización para que el FC Barcelona inscriba a Dani Olmo y Pau Víctor. La institución que preside Javier Tebas acusa al CSD de romper las normas de control económico que rigen el fútbol profesional español.
La resolución, ratificada el pasado 3 de abril, contradice la decisión previa de LaLiga y la RFEF, que habían bloqueado la inscripción por considerar que el Barça no cumplía con el ‘fair play’ financiero al cierre del ejercicio 2024. Para LaLiga, esto rompe el principio de igualdad entre clubes y pone en peligro la integridad del torneo.
El conflicto llega ahora a los tribunales, donde LaLiga ha solicitado medidas cautelares urgentes que frenen lo que considera un grave precedente. En palabras de Tebas, se trata de una “intervención más política que jurídica”.
¿Qué implica esto?
Más allá del caso puntual, el enfrentamiento plantea una duda de fondo: ¿hasta qué punto puede intervenir el CSD en decisiones técnicas y financieras del fútbol profesional? El fallo judicial podría redefinir el equilibrio de poderes en el fútbol español.
