14 de marzo de 2025

El árbitro que expulsó a Jude Bellingham es exonerado de irregularidades por la RFEF.

Comparte y apoya mi sitio

El árbitro español José Luis Munuera Montero ha sido exonerado de cualquier irregularidad luego de que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) investigara un posible conflicto de interés entre su labor arbitral y una empresa privada de consultoría deportiva de la que es copropietario.

La RFEF emitió un comunicado este jueves en el que informó que no se tomarán más acciones contra el colegiado de 41 años, quien ha estado en el centro de la polémica desde que mostró una tarjeta roja a Jude Bellingham, del Real Madrid, por dirigirse a él con lenguaje inapropiado durante el empate 1-1 ante Osasuna el pasado sábado.

Munuera cerró su cuenta de Instagram tras recibir decenas de miles de comentarios, incluidos insultos y amenazas de muerte después del partido. La controversia aumentó luego de que los diarios Marca y AS informaran que su empresa, Talentus Sports Speakers, tenía vínculos comerciales con instituciones futbolísticas y clubes profesionales.

Esto llevó a la RFEF a abrir una investigación para analizar si dichas actividades eran compatibles con su labor como árbitro.

«Tras el estudio, análisis y verificación detallada de la información comercial, corporativa y contable, la actividad económica de estas empresas y el grado de participación de Munuera Montero en ellas, el Departamento de Cumplimiento Normativo de la RFEF ha concluido que no existe un conflicto real o potencial entre las actividades empresariales del árbitro y su labor en Primera División», señaló la RFEF.

«En consecuencia, y de acuerdo con la normativa interna sobre conflictos de interés y las buenas prácticas de la RFEF, no hay motivo alguno que justifique la adopción de medidas disciplinarias contra el Sr. Munuera Montero.»

Munuera expulsó a Jude Bellingham en el empate del Real Madrid ante Osasuna el pasado fin de semana. (Foto: Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images).

El colegiado negó cualquier irregularidad el martes y aseguró que su empresa no ha facturado a ninguna entidad deportiva desde su creación, además de amenazar con emprender acciones legales contra los medios de comunicación.

«En los últimos meses, se ha hecho evidente el ataque desproporcionado contra el colectivo arbitral, y en esta última ocasión he sido el objetivo», declaró.

La RFEF informó el lunes que los árbitros están indignados por los ataques sufridos por Montero desde la expulsión de Bellingham, señalando que esta situación refleja el odio y la violencia verbal a los que se enfrentan los colegiados.

Por su parte, Bellingham recibió una sanción de dos partidos a pesar de alegar en su defensa que el árbitro lo malinterpretó, ya que estaba hablándose a sí mismo en inglés.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *