El colorido Astro Bot se coronó como Juego del Año en los prestigiosos The Game Awards, superando títulos como Final Fantasy 7 Rebirth y Elden Ring: Shadow of the Erdtree. Además, ganó otras tres categorías: Mejor Juego Familiar, Mejor Juego de Acción/Aventura y Mejor Dirección. Nicolas Doucet, líder de Team Asobi, dedicó el premio con un guiño a Nintendo.
La gala también fue fructífera para el indie Balatro, con tres galardones, incluido Mejor Juego Móvil. El RPG Metaphor: ReFantazio destacó con tres premios, mientras que Black Myth: Wukong conquistó al público con el Player’s Voice Award. Sin embargo, Final Fantasy 7: Rebirth, nominado en siete categorías, solo obtuvo el premio a Mejor Música.
Celebridades como Snoop Dogg y Harrison Ford dieron un toque especial a la noche, mientras que se revelaron importantes anuncios como la secuela de Okami, The Witcher 4 y un nuevo título de Naughty Dog: Intergalactic: The Heretic Prophet.
A pesar del brillo de la ceremonia, las críticas se centraron en la falta de espacio para reflexionar sobre problemas de la industria, marcada por despidos masivos. Este año, se creó el premio Game Changers, otorgado a Amir Satvat por ayudar a desarrolladores despedidos a encontrar empleo. Swen Vincke, de Larian Studios, también fue aplaudido por abogar por juegos con pasión genuina en lugar de metas comerciales.
