Río de Janeiro, 12 de mayo de 2025 — La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) ha confirmado este lunes que el italiano Carlo Ancelotti será el nuevo entrenador de la selección nacional de Brasil, con el objetivo de liderar a la “Canarinha” en el camino hacia la Copa Mundial de la FIFA 2026. El anuncio pone fin a meses de especulación y confirma que el técnico dejará su cargo en el Real Madrid al término de la presente temporada.
Según comunicaron medios como Cadena SER, AS y Reuters, el contrato entre Ancelotti y la CBF ya está sellado, y el técnico tomará el mando del equipo sudamericano a partir del 26 de mayo. Su debut oficial será el 6 de junio ante Ecuador, en el marco de las Eliminatorias Sudamericanas. Luego, enfrentará a Paraguay el 10 de junio, ambos partidos en busca del boleto al Mundial que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá.
Primer técnico extranjero en dirigir a Brasil
La llegada de Ancelotti marca un hecho histórico: será el primer entrenador no brasileño en asumir el mando de la selección en más de seis décadas. El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, calificó la decisión como estratégica y ambiciosa: “Traer a Ancelotti representa un paso firme hacia la recuperación de nuestro lugar en la cima del fútbol mundial”.
Cierre de ciclo en el Real Madrid
A sus 65 años, Carlo Ancelotti se despide del Real Madrid con una vitrina repleta de títulos. En su segunda etapa en el club blanco conquistó 15 trofeos, incluidos tres Champions League y dos títulos de LaLiga, consolidándose como uno de los entrenadores más exitosos en la historia del conjunto merengue.
Su lugar en el banquillo madridista será ocupado por Xabi Alonso, quien deja al Bayer Leverkusen tras una temporada histórica en la Bundesliga. El exmediocampista del Madrid y de la selección española tomará las riendas del equipo a partir del 1 de junio.
Un reto mundialista
El contrato de Ancelotti con la CBF se extenderá inicialmente hasta el Mundial de 2026, con una cláusula de posible renovación hasta 2030. El objetivo principal: devolver a Brasil al lugar más alto del fútbol internacional, tras la frustración del Mundial 2022 y un proceso clasificatorio que arrancó con altibajos.
El reto no será menor: integrar una nueva generación de talentos con figuras consagradas y recuperar la identidad de un equipo que históricamente ha sido sinónimo de excelencia.